La decadencia de una vida sin rumbo...

Hace ya varios meses que definitivamente deserte del estudio, esto debido a mi para nada prolífica vida estudiantil.

me hace preguntarme, ¿como fue que llegue a este extremo?

es verdad que mas que aprender en la escuela solo iba a sobrevivir otro día mas, esperando que algún día, esta tormenta terminara...
pues no es lo mismo "ir a la escuela" a "estudiar en la escuela", yo diría que no soy un mal estudiante, pero si un pésimo monigote que no hace mas que repetir. Me percate en el trascurso de mi vida estudiantil que habían distintas maneras de conceptualizar el termino "estudiante".

Yo era el clásico caso perdido, el chico que de alguna manera solo podría categorizarse como "el que pasa de a panzaso", y no era para menos, solo estudiaba 5 minutos antes del examen (y vaya mi arrogancia y necedad cuando me habían avisado de mucho antes) sobrevivia gracias a mis amigos, si yo no hacia la tarea, ellos en principio con gusto, después con indiferencia, después con molestia y finalmente con algo de decepción se daban cuenta de que en verdad yo no quería estar ahí, pero ni yo mismo lo llegaba a entender, pero, ¿cual era mi razón de esa forma de existencia tan auto destructiva? ¿que me llevo al final de mis días estudiantiles?. Eso me lo pregunte por mucho tiempo, y siempre creí tener la respuesta, y comprobe de primera instancia el viejo proverbio chino que recita así: "el ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona"... ¡OH! cuanto dolor podríamos ahorrarnos a nosotros mismos si de alguna manera escucháramos de vez en cuando a nuestra voz interior.

hoy no tengo un rumbo fijo, no soy mas que una hoja al viento, un barco a la deriva, una sombra... decearía saber que es lo que estoy haciendo, pero caigo en cuenta que realidad no hay ser vivo en esta existencia que este consciente de ello... solo flotamos, no sabemos que nos deparara la vida, podemos elegir quizás, de alguna manera como en causarnos, cono lo hace una nave y su timón... pero estaremos atenidos a lo inevitable del destino mientras dure la vida y se extinga nuestra flama. Así de triste suele ser la vida, parece ser una maldita chascarrilla divina, donde no somos de relevancia, puesto que en si mismos no la tenemos; puede que las acciones que nos definieron, sobrevivan mas que cualquier monumento erigido, pero al final de nuestros días... solo lo que quedara de nosotros, además del polvo, quizas sea nuestro primer recuerdo en esta vida, un suspiro y finalmente un camino lleno de oscuridad.