... Y es que todo lo que necesite durante tanto tiempo estuvo siempre ahí... justo a mi lado, sin percatarme, solo, muerto ya por las visiones del dolor y el fastidio no podía vislumbrar mas que unos campos elíseos de amargura, mi propio pedazo de infierno terrenal. Y es que todo lo que siempre añore encontrar, eso que yacía tan lejos para mi, esa inalcanzable felicidad, se veía irrumpida por ominosos recuerdos y pensamientos desoladores; en mi hierática paroxisidad... mas bien, solo aparente calma, pseudo-estoicismo.
Y es que viví mucho tiempo sufriendo por amores rasgados, por injurias y engaños, intrigas de terribles confesiones, actitudes lubricas y desden en general, provocado por las obsesiones, por amores incompletos y mujeres con poca cabida en alguien fijo... y yo, siempre custodio de
tristita y ascedia; llegue a pensar que la vida era así, que mi vida tenia que ser así, irrevocable mandato vital, castigo divino a mis errores o el karma cobrando su parte en mi imprudencia.
Ha pasado el tiempo y de la celda de demudados sueños en la que he estado revolcando mi vida apareció finalmente la luz, el cálido viento que disipo esa inmundicia: Llego ella.
A veces le pregunto, incrédulo por tanta belleza en sus acciones, por tanta piedad para un condenado dantesco como yo, ¿por que que amarme si soy mas impío que su mas retorcida pesadilla? ¿por que ser la bella de esta horrible bestia que soy?
Y es que el amor no tiene fronteras ni razones, no hay explicasiones para que ella este ahí, solo debo agradecer el cálido abrazo de ella después de no vernos en largo tiempo, su simple presencia diciendome "aquí estoy" cuando la desesperacion me alcanza, ese beso que dice "no te vayas", y su cabeza postrada en mi pecho, sintiendo su respiracion sociega que me llena de vida, como ese calido suspiro que da ella al estar juntos. Son esas cosas las que, caigo en cuenta, me dan fuerza para querer arriesgarme a la vida de nuevo.
Y es que no podría ser mas bella, no podría ser mas perfecta, no alcanzo a ver sus defectos, pues sus virtudes me ciegan. Es ella ahora la razón por la cual vivir, la razón por la cual respirar y cuidarme a mi mismo de nuevo... dejar de ser un desvalido emocional. En esa penumbra, en la arcada que era el simple hecho de respirar y despertar cada día, en mi decadencia fue ella la luz del día que me levanto de mi tumba prematura.
Camino y respiro de nuevo, hoy solo camino de nuevo para estar a su lado y sentirme realmente vivo... hoy soy un ahashvero, no esperando el juicio final, si no esperando formar una vida plena con ella, que este siempre a mi lado. Soy un errante, quiero alcanzar mis sueños alguna vez muertos y enterrados por mi hace tiempo; hoy estoy listo para viajar por senderos luminosos y dejar de arrastrarme por un camino de dolores abyectos.
No se cuanto tiempo sean las cosas así, pero de verdad añoro que sea por siempre.
Aquí estoy para ti, mi vida, pues tu eres realmente la única vida que deseo.
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